Hoy he tenido una sensación que hacía tiempo que no tenía y que es fabulosa dicho sea de paso: como un golpe en el pecho, una sacudida con fuerza que se va desvaneciendo poco a poco y te transporta hasta dejarte un sabor dulce y una sonrisa que no puedes borrar en un rato. ¡Emoción! Amores platónicos imperecederos: los mejores, los perfectos y que nunca se olvidan ^^... eso me ha ocurrido hoy al encontrarme de pronto, después de todos estos años de conocerle, una foto suya que jamás había visto y en la que aparece simplemente inefable. Sólo quería compartir este momento.
Os presento a Maurice...
*siiiiiiiiiiiiiiiiigh...*
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